3.

 "... la tragedia ha salido del coro trágico y  no era en su origen sino un coro, y nada más que un coro." O sea, un fenómeno musical cuasi dramático con partes cantadas, con partes recitadas o declamadas en acompañamiento de flautas, a veces por todo el coro; y a veces solo por el corifeo o el "artista" portador "del buril de los mundos dionisiacos" como diría Nietzsche.  "De todos los confines del mundo antiguo ... desde Roma hasta Babilonia, nos llega documentación de la existencia de las fiestas dionisiacas ..." . Efectivamente, Eurípides -que se lo supone plasmando o animando alguna sólida tradición popular- pone en boca de Dionisos en modo monólogo, esta información: "He dejado las vías de los lidios, ricos en oro, y de los frigios;  las mesetas de los persas, azotadas por el sol y los muros de Bactria, y la tierra de los medos, de duro invierno he recorrido, y la Arabia feliz y toda el Asia cuanta junto al salado mar se extiende con sus ciudades bien cercadas, llenas de griegos mezclados  y de barbaros junto; y esta es la primera ciudad griega donde llego, después que allá he bailado y he fundado mi  misterio, para que los hombres me tengan por manifiesta divinidad." Efectivamente, Dionisos el bailador tiene también su lado de traumado o acomplejado, pues, varias veces se lo puede ver intentando explicar como justificándose que lo suyo era metafísico, divino. La confrontación apolínea.

 a Dioniso llevad

desde los montes de Frigia hasta las calles

de Grecia en que se puede danzar ...